NUESTRA HISTORIA
Los primeros antecedentes de la Pontificia, Real e Ilustre Hermandad de Nuestro Padre Jesús en el Paso de “El Prendimiento” habría que buscarlos allá por el Siglo XVII cuando los panaderos y horneros de la ciudad de Orihuela se incorporan a la procesión del viernes santo con la “Oración en el Huerto”. En 1712 tras el paréntesis de la Guerra de Sucesión vuelven a salir las procesiones que alcanzan su mayor auge a mediados de ese siglo XVIII.
En 1736 D. Francisco Salzillo esculpió un paso de El Prendimiento para la Cofradía de Jesús de Murcia que posteriormente vendió a Orihuela.
Se compone el paso de la imagen de Jesús Nazareno como figura principal vestido con túnica morada, de tela de plata y diadema del mismo metal que aparece dialogando con Judas, ataviado con capa y túnica de tafetán.
San Pedro, con saya de tafetán verde y capa carmesí está asestando el golpe a Malco que aparece caído en el suelo, se aprecian rasgos típicos la gubia de Salzillo en la imagen de Jesús mientras que el resto de personajes se acercan a los rasgos estilísticos de su padre Nicolás, según el profesor D. Cristóbal Belda Navarro, catedrático de Historia del Arte en su libro “Estudios sobre Francisco Salzillo”.
La obra permaneció en esta ciudad hasta que desapareció en la guerra civil española del 1936 debido a la persecución irracional de todo aquello que estuviera relacionado con motivos religiosos, provocando la destrucción, quema e incendio de cuanta imaginería saliera al paso.
En 1848 el escultor italiano Santiago Baglietto afincado en Murcia, fiel copista de la obra imaginera de Salzillo, realizó para Orihuela una copia fidedigna de su famosísima Oración en el Huerto que finalizó en 1849 y cuyo coste ascendió a 5.998 reales de vellón incluídos su adherentes, es decir, la vestimenta de las imágenes.
Esta obra también fue destruida en el verano de 1936. La demanda de escultura religiosa tras la contienda fue abrumadora, llevando a muchos escultores que previamente se habían dedicado a obras civiles o profanas a redescubrir la tradicional escultura policromada, siguiendo los pasos de los insignes maestros de los siglos XVII y XVIII.
El 14 de febrero de 1943 un grupo numeroso de hombres respetables, habitantes de la calle y plaza de San Agustín de Orihuela, se congregaron en la histórica Iglesia de San Sebastián convocados por los visionarios promotores de una idea destinada a colmar esos huecos en la Semana Santa.
De aquella que resultó ser la primera Junta de la futura y actual Hermandad de El Prendimiento quedó escrito por el Secretario lo sucedido:
En la ciudad de Orihuela a catorce de Febrero de mil novecientos cuarenta y tres se reunieron en el locutorio de la Iglesia de San Sebastián para lo que previamente han sido citados vecinos del barrio de San Agustín, Camino de Cartagena y otros, en número de unos cincuenta con el propósito de construir una hermandad que tome a su cargo la misión de recaudar fondos y destinado la reconstrucción del Trono del Prendimiento y continuar con todo entusiasmo la labor necesaria para dar en lo que se pueda mayor realce a nuestras procesiones de Semana Santa.
Se eligió por unanimidad la Junta Directiva que se expresa al margen:
Hermano Mayor: D. Manuel Cayuelas Ballesta.
Presidente: D. Francisco Lozano Lidón.
Vicepresidente: D. Ignacio Genovés Genovés.
Secretario: D. Atanasio Díez García.
Tesorero: D. Vicente Torres Abadía.
Contador: D. Manuel Mateo Almarcha.
Vocales:
D. Luis Boné Rogel. D. Eduardo Aracil Andreu.
Esteban Montero Ureña. D. Bernardo Crespo Lorente.
José Serrano Corres. D. José Fenoll Villegas.
José Giménez Torres. D. Manuel Lozano Iborra.
En este memorable momento, se acordó que en aquel día y en aquel lugar quedaba establecida de manera perpetua la Hermandad que, con el tiempo, recibiría el prestigioso título de Pontificia, Real e Ilustre Hermandad de Nuesto Padre Jesús en el Paso de El Prendimiento.
Esta Hermandad no sería una más. Se convertiría en un elemento esencial en la vida y las emociones de la ciudad y la región de la Vega Baja, enriqueciendo aún más su profunda tradición religiosa y artística, y dejando una huella imborrable en la historia de Orihuela.
La importancia de El Prendimiento se hizo evidente en la junta del 8 de abril de 1945 (4ª Junta de la Hermandad). En esta reunión, se comunicó a los presentes sobre un acontecimiento significativo: el nombramiento del Sr. Alcalde de la Ciudad de Orihuela, D. Rafel García Pertusa como Presidente de Honor, título que había aceptado con satisfacción, lo que reafirmaba su compromiso con la Hermandad y con Orihuela.
